APARICIÓN
Ramón Repiso
Los talleres, el lento despertar
de un motor que preludia el desencanto.
Comienza el barrio a hablar.
Sudor y contrabando.
Bajo un lunes de plomo, la ciudad
grita lo que se vende.
Aliento gris, colmillos de cristal;
así vive la gente.
Pero dejemos ya
de traficar con la tristeza;
entre tanta magnolia de alquitrán,
tú en bicicleta.
1 comentario:
¡Cuántas y cuántos "tú en bicicleta" hacen falta a veces para acabar con los "colmillos de cristal" de cada día!
Muchas gracias por compartir este estupendo poema y presentarme a otro vate.
Publicar un comentario